La ofensiva contra los derechos de mujeres, niños, niñas y adolescentes por parte del Poder Ejecutivo, referentes de La Libertad Avanza continúa, se vuelve cada vez más agresivo y se transforma en desprotección. En el ámbito legislativo oficialista, la situación no es diferente. En noviembre de 2024, la diputada libertaria, Lilia Lemoine y la senadora del mismo espacio, Carolina Losada, presentaron con el apoyo rotundo del denunciado ministro de Justicia de la Nación, Mariano Cuento Libarona, dos proyectos que buscan penalizar las supuestas “falsas denuncias” en materia de abusos sexuales en las infancias y violencias de género. El proyecto de Losada obtuvo dictamen en la Comisión de Justicia y Asuntos Penales y está listo para pasar al Senado.
Uno de los casos utilizados como ejemplo de estas supuestas falsas denuncias fue el de Pablo Ghisoni, un médico de Lomas de Zamora denunciado por violencia de género y abuso sexual. El caso Ghisoni es complejo, como todos los atravesados por violencias de género. Lleva más de 13 años en la justicia y pese a que Ghisoni fue absuelto en 2023, la instancia judicial sigue abierta. En las últimas semanas, el caso cobró resonancia mediática por la publicación en redes de un video de Tomás, uno de sus hijos quien asegura haber sido víctima “de un entorno que me enseñó a repetir”.
El joven tiene 20 años y desde los 4 su vida estuvo atravesada por litigios judiciales, que comenzaron con la demanda por la tenencia suya y de sus dos hermanos y continuaron con una denuncia por abusos y maltratos por parte de su padre. En ningún momento de la pieza audiovisual menciona a su madre, Andrea Vazquez y también dice “no estoy acá para negar los abusos que merecen justicia”. Sin embargo, su voz fue utilizada mediáticamente para reforzar la idea de las falsas denuncias y reflotar la inexistente figura del Síndrome de Alienación Parental (SAP), que no cuenta con el reconocimiento de ninguna autoridad en el mundo, empezando por la Organización Mundial de la Salud.
Hablar de Abusos Sexuales en la Infancia (ASI) es incómodo, angustia, genera temor. Conocer los riesgos, los ámbitos privados y familiares donde suceden preocupa y duele. Para entender la retractación de una víctima, por ejemplo, hay que saber que en los casos de ASI, es una etapa esperable. Yama Corin es madre protectora e integrante de la Agrupación Mundanas, desde donde acompañan a mamás y personas afectadas por ASI. En diálogo con Tiempo, reflexionó que “quienes trabajamos con esta problemática entendemos que una situación de abuso sexual tiene un profundo daño en la estructura psíquica de una persona, en la posibilidad frente a un hecho traumático de poder construir de eso un relato”
Consultado por Tiempo, el ex Juez y referente en la materia, Carlos Rozanski afirmó que “la operación que se está haciendo contra Andrea Vázquez y a favor del victimario que es Pablo Guisoni, es una muestra clara de la posjusticia. Lo están intentando a través de los medios, en colaboración con algunos jueces y fiscales indecentes. Es una estupidez lo que están haciendo, pero a la vez de mucha peligrosidad”. Lo cierto es que más allá del video de Tomas, un abanico de voces utilizan su cara, su historia y relato para atacar a su madre, en pos de defender a un victimario colectivo: los varones denunciados por abusos y violencias.
El mismo día que se conoció el video del joven, el fiscal Bettini Sansoni denunció a Andrea Vazquez por falso testimonio y asociación ilícita.
En el proyecto de la senadora Losada, se puede leer que para ella “es necesario crear conciencia sobre el daño que producen las falsas denuncias, cómo vulneran los derechos humanos y desbaratan las garantías jurídicas (…) como así también legislar con mayor especificidad esta problemática y con pena agravada los casos de falsas denuncias por violencia de género, abuso o acoso sexual y violencia contra niños, niñas y adolescentes”.
Este proyecto no propone, ni otros en el poder ejecutivo ni judicial, mejorar los instrumentos y organismos que abordan las violencias de género, ni crea mecanismos confiables para el trabajo en estas problemáticas. En diálogo con Tiempo, la diputada Nacional Mónica Macha, que además preside la Comisión de Mujeres y Diversidades en la Cámara Baja, afirmó que “el concepto de falsas denuncias es una estrategia que utilizan especialmente aquellos sectores y organizaciones que defienden pedófilos. El tema de la pedofilia es un problema a nivel mundial, en nuestro país también y no la estamos encarando con la gravedad y la responsabilidad que requiere”
Desde que asumió la presidencia Javier Milei desarticuló políticas públicas que protegían a mujeres e infancias, usando argumentos como el de la supuesta “ideología de género” o el avance del “wokismo”, un término al que también recurren las extremas derechas en todo el mundo. El último 8 de marzo, el Poder Ejecutivo difundió un video donde se dice que los femicidios se habían reducido, para mostrar el “éxito” de la eliminación del Ministerio de las Mujeres y otros organismos. Sin embargo, según datos de la Oficina de la Mujer de la Corte Suprema de Justicia los femicidios se mantienen estables desde 2014 y no hay datos públicos para afirmar que la violencia de género bajó: con la eliminación de la Subsecretaría de Protección contra la Violencia de Género, por primera vez en 40 años Argentina no tiene un organismo nacional rector en políticas de género.
En mayo de este año el gobierno nacional discontinuó 13 programas vinculados a la protección de mujeres, niños y niñas de las violencias. Esta decisión se sumó al fuerte recorte en las partidas presupuestarias destinadas a prevenir y atender la violencia de género, especialmente en el Programa Acompañar y la Línea 144, que ocurrieron en 2024. En ese sentido, Macha afirma que “no es la primera vez que se presentan proyectos vinculados a falsas denuncias, pero hoy tienen un impacto distinto. Hay todo un aparato del gobierno nacional promoviendo que las mujeres no denuncien situaciones de violencia de género y que no denuncien los abusos sexuales en ellas o en niños, niñas y adolescentes. Promover esta idea de falsas denuncias y darle tanta entidad también tiene que ver con eso”
¿La existencia de denuncias falsas alcanza para decir que todas lo son? Reflexionando en relación a esa pregunta, la diputada afirmó que “en la opinión pública hay mucho desconocimiento y a veces con algunos casos o ejemplos que se toman como paradigmáticos y no lo son, se esconde todo un entramado que también incluye a los medios de comunicación”

¿A quienes defienden los proyectos por las “falsas denuncias”?
“No solo hay miedo de pedir ayuda, sino que existe una clara convicción de que no vamos a tener respuesta cuando vamos a denunciar violencias” dice Yama Corin, madre protectora e integrante de la Agrupación Mundanas. Para ella, “el Poder Judicial siempre contó con privilegios y un posicionamiento patriarcal en su accionar frente a denuncias de violencia de género y abuso en las infancias. Lo denunciamos desde siempre, pidiendo una reforma judicial que le de protección inmediata a las víctimas y condena efectiva a los violentos y abusadores con procesos que no fueran revictimizantes, que es lo que vemos constantemente”.
Respecto de la validez del supuesto fenómeno masivo de las denuncias falsas, Corin afirma que “así como condenamos que el presidente haya usado de ejemplo el hecho de una pareja de homosexuales que fue abusadora para decir que todos los homosexuales son abusadores, podríamos decir que, aunque hubiera una mujer que denunció falsamente eso no da cuenta de una problemática en su extensión y profundidad. Lo cierto es que al gobierno no le interesa comprender la problemática y quiénes son las personas afectadas para saber a quién acompañar y cuál es la raíz social, sino todo lo contrario, utiliza los casos que le sirvan de ejemplo para públicamente generar una violencia social en contra de sectores que el gobierno ubicó como enemigos”
Corin sabe de pasillos judiciales, audiencias tortuosas y miradas acusadoras. Desde hace mucho acompaña a mamás que detectan abusos en sus hijos e hijas, como a ella misma le paso. Cuando su hija tenía 9 años denunció el abuso de su progenitor. Recién a sus 18 años fue citada a declarar. A los 21 el expediente fue elevado a juicio. Después de 12 años de proceso judicial el acusado fue absuelto: no valió el testimonio de la joven, ni los peritos y testigos que fueron aportados a la causa. La defensora del acusado es Patricia Anzoategui, directora del Observatorio de Falsas Denuncias. Ella fue la encargada de denunciar penalmente a la propia Corin. También es autora del libro Hienas. Abogados de Familia vs. Falsas Denuncias.
Dos proyectos que refuerzan prejuicios, desalientan denuncias y generan miedo
Según un informe de ONU Mujeres de 2024, las denuncias falsas son muy poco frecuentes: representan menos del 1 por ciento a nivel global. En España, por ejemplo, solo representan el 0.0084 por ciento de los casos de violencia de género. En Argentina no hay estadísticas oficiales, pero según datos del Consejo de la Magistratura, sólo el 3 por ciento de todas las denuncias penales (no solo las de género) terminan catalogadas como falsas o infundadas
Aunque las denuncias falsas existen, los datos muestran que son identificables porque no son masivas. En contraste, lo que sí abunda es la soledad y el silencio de quienes sufren violencias. Según la Encuesta de Prevalencia de Violencia implementada en el marco de la Iniciativa Spotlight de la Unión Europea (2022), el 45 por ciento de las mujeres argentinas sufrió violencia alguna vez en su vida por parte de su pareja actual o anterior, pero solo una de cada cuatro buscó ayuda o llegó a denunciar.
En la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, los estudios realizados muestran cifras similares: en 2018 el 22 por ciento de las mujeres que vivieron violencia doméstica dijo haber buscado ayuda en alguna institución pública, mientras que en el 2023 lo hizo casi el 30 por ciento según un estudio de ELA y la Dirección General de Estadísticas y Censos (DGEC) del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.
Según el Observatorio de Femicidios en Argentina “Adriana Marisel Zambrano” que dirige La Casa del Encuentro, en lo que va del año se produjeron 140 femicidios y vinculados de mujeres y niñas, 1 lesbicidio, 1 transfemicidio y 8 femicidios vinculados de varones adultos y niños. Solo 21 víctimas habían realizado denuncia.
El proyecto de Losada, un daño irreparable para niñes y madres
“El contexto que está viviendo el país es absolutamente imprescindible para que se puedan pensar, elaborar y presentar proyectos brutales, como el de Carolina Losada y el de Lilia Lemoine” afirmó en diálogo con Tiempo Carlos Rozanski, ex juez federal y presidente de la Asociación Civil de Altos Estudios en Violencias y Abusos Sexuales (AEVAS). Rozanski encabezó hace pocos días la presentación de una denuncia contra el ministro Cuneo Libarona por delitos de acción pública a partir de la divulgación de un video en el que se lo ve ofreciendo servicios para limpiar la imagen de Timothy Ballard, un ex agente de inteligencia norteamericano que, según la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, está sospechado y acusado por ser un abusador sexual. “No es casual que se promuevan proyectos que están vinculados a eliminar derechos esenciales como están haciendo en todos los ámbitos. Es una característica de este gobierno criminal” aseguró Rozanski y en ese sentido afirmó que “el hecho de que el propio ministro de Justicia diga en el senado que el 70 por ciento de las denuncias son falsas cuando las cifras que existen dan cuenta de porcentajes debajo del 1 por ciento demuestra claramente el momento que vivimos, de la post verdad que esta gente representa, y también de la post justicia”
El proyecto presentado por la senadora radical de la provincia de Santa Fe, Carolina Losada propone aplicar penas de hasta seis años de prisión en los casos de denuncias falsas vinculadas a delitos graves como violencia de género, abuso o acoso sexual, y violencia contra niños, niñas y adolescentes.
Para Rozanski, en caso de aprobarse la norma “sería un daño irreversible”. En ese sentido, el abogado expresó que “no sólo las víctimas quedarían con crímenes absolutamente impunes, sino que habría una falta de reparación en esas víctimas, niñas y niños y adolescentes, y finalmente dañara a madres protectoras y a cada una de las y los profesionales que les ayudan. Durante siglos se silenció a los niños, después se empezó a silenciar a las madres porque no conviene dejarlas hablar. El resultado de leyes como estas son una brutalidad inconfesable y sería parte también de este presente destructivo como pocos en la historia del país”
Una ley patriarcal
El proyecto 228/2025 presentado por Losada lleva además las firmas de Mercedes Valenzuela, Victor Zimmermann, Rodolfo Suarez, Pablo Blanco y Flavio Fama. Cuenta con dictamen en la Comisión de Justicia y Asuntos Penales y está listo para pasar al Senado.
De acuerdo a un informe del Equipo Latinoamericano de Justicia y Género (ELA), “cualquier denuncia falsa es un problema atendible por los perjuicios que podría generar a las personas afectadas. Sin embargo, al enfocarse únicamente en casos de “falsas denuncias” que involucran violencia por razones de género, la reforma refuerza prejuicios históricos sobre las mujeres”.
Desde ELA aseguran que se trata de una normativa que “suma una barrera adicional a las innumerables dificultades que enfrentan en el acceso a la justicia las mujeres cuando deciden pedir ayuda ante situaciones de violencia por razones de género”
También alertan que esto puede implicar una amenaza penal para quienes planteen una denuncia o declaren en un juicio por delitos contra menores de edad que eventualmente no puedan ser probados por la justicia, aumentando la desprotección de niños, niñas y adolescentes.
Asesoramiento y contactos
En la provincia de Buenos Aires, el Ministerio Publico brinda información sobre los tipos y ámbitos en los que suceden las violencias de género hacia mujeres, niñxs y adolescentes. En su sitio oficial se puede acceder a información sobre dependencias que abordan estas situaciones donde hay folletos y mapas donde se puede acceder para realizar una denuncia o pedir ayuda. En la Ciudad de Buenos Aires, tanto la Oficina de Violencia Doméstica como la Unidad Fiscal Especializada en Violencia contra las Mujeres (UFEM) reciben a quienes necesitan denunciar. La línea 144, vaciada, pero en vigencia, ofrece atención y asesoramiento a personas en situación de violencia y riesgo. En relación a los abusos sexuales en las infancias, la Plataforma ESI brinda materiales para detectar, acompañar y escuchar a niños y niñas.