Información reveladora sobre el crimen
Nuevos datos sobre el brutal asesinato de Brenda del Castillo (20), Morena Verdi (20) y Lara Morena Gutiérrez (15) han surgido, confirmando que el pozo donde fueron encontrados sus cuerpos había sido cavado antes del ataque. Esta información fue proporcionada por el ministro de Seguridad bonaerense, Javier Alonso, quien destacó la preparación meticulosa que llevó a cabo la banda narcotraficante para intentar evadir la justicia.
Alonso expresó su indignación sobre el hallazgo de los cuerpos, indicando: «La verdad es que es una indignación, la forma en que se encontraron a las chicas: estaba hecho para que quede impune, lo planificaron así. El pozo que hicieron, cómo las enterraron y el estado en el que estaban los cuerpos, a todos nos dio una rabia impresionante» en una entrevista con Radio Splendid.
Detalles del operativo de búsqueda
El funcionario explicó el proceso seguido para encontrar la casa en Florencio Varela, donde las jóvenes habían estado. «Nosotros tenemos aproximadamente unos 1500 casos de búsquedas de personas al mes. Cuando vemos que es un caso más complejo, ahí pasa a la DI. Hicimos un perfil de las personas buscadas y comenzamos a trabajar con un protocolo agresivo de búsqueda», señaló.
Al realizar la búsqueda de una camioneta Tracker blanca, Alonso indicó que al ser detectada como adulterada, se entendió que el crimen había sido premeditado. «Empezamos a buscarla por todos lados y vimos que en Varela entró pero no salió», añadió.
La ruta de los teléfonos y la escena del crimen
Otro aspecto importante del caso fue la rastreo de los teléfonos a través de las antenas. Esto permitió a los investigadores seguir el movimiento de las víctimas desde La Matanza a Lomas, luego a Florencio Varela y finalmente hacia Barracas, en el barrio 21-24. Al llegar a la casa en Florencio Varela, el equipo notó un fuerte olor a cloro y encontró a dos personas limpiando, así como otros individuos asustados que pensaron que iban a ser asesinados.
Según la reconstrucción del crimen, la banda había planificado el evento con antelación. «Ellos llegaron el viernes temprano al lugar y cavaron el pozo. Querían ocultar el crimen, haciendo que las víctimas parecieran desaparecidas, como si hubieran sido atrapadas por la trata de personas o algún novio», teorizó el ministro.
Próximas investigaciones y perfil del agresor
Alonso también informó que se está buscando a un narco de 23 años, conocido como Julito ‘Pequeño J’, quien supuestamente dio la orden del asesinato y la transmisión en vivo del evento por redes sociales. «Es terrible, por eso lo contamos. Cuando le damos trascendencia pública, le quitamos poder. No sabemos por qué las víctimas despertaron la ira de esta persona que decidió disciplinar a todos sus terratenientes para construir su autoridad en base al terror», añadió.
Los investigadores creen que Florencio Varela funcionaba como un depósito de droga utilizado por la banda. «Nuestra hipótesis es que era una base logística: ellos tenían una venta que era a través del narcomenudeo con mochilas. Seleccionaron Varela porque les era más conveniente», concluyó.