Home Deportes La construcción imperceptible del imperio de Marruecos, rival de Argentina en la final del Mundial Sub 20

La construcción imperceptible del imperio de Marruecos, rival de Argentina en la final del Mundial Sub 20

La construcción imperceptible del imperio de Marruecos, rival de Argentina en la final del Mundial Sub 20

Marruecos y su ascenso en el fútbol internacional

Marruecos, que se enfrentará a Argentina en la final del Mundial Sub 20 en Chile, ha transformado el panorama del fútbol global. Similar a la estrategia del juego de mesa TEG, este país ha colonizado territorio en el ámbito futbolístico, creando un verdadero imperio. Durante muchos años, los talentos africanos eran captados por selecciones europeas, pero Marruecos ha estado construyendo su identidad futbolística al integrar a jugadores formados en Europa y reforzando sus categorías juveniles.

Este esfuerzo culminó en la histórica semifinal que alcanzaron en la Copa del Mundo Qatar 2022, donde contaron con 14 futbolistas nacidos fuera del país, destacando a Achraf Hakimi, un defensor del PSG formado en España. Ahora, con un grupo de diez juveniles que también han crecido en el extranjero, Marruecos mira hacia su próximo desafío, donde se medirá contra el equipo dirigido por Diego Placente este domingo a las 20:00.

Marruecos en la historia de la Copa del Mundo

Desde 1970, Marruecos ha participado en cinco Copas del Mundo (1970, 1986, 1994, 1998 y 2018), y su único avance a la fase de grupos fue en México 1986. Entre 1930 y 1962, no hubo representación de países africanos, y en 1966, Sudáfrica se clasificó pero no participó debido al apartheid. Marruecos hizo historia al ser el primer país africano en competir en un Mundial en 1970, y actualmente se posiciona junto a Nigeria y Túnez como una de las naciones africanas con más participaciones, teniendo una menos que Camerún.

Crecimiento en categorías juveniles

En competiciones sub 20, Marruecos ha ido aumentando su presencia con el tiempo: logró llegar a la etapa de grupos en 1977, octavos de final en 1997, cuartos en 2005 y ahora la final en 2025. A lo largo de su trayectoria, siempre mostró competitividad, pero en los últimos años ha elevado claramente su nivel de juego.

El reconocimiento de este talento no es reciente. Carlos Bilardo, el destacado entrenador argentino, recordó un viaje a Marruecos hace 25 años con Estudiantes de La Plata y notó que el futuro del fútbol estaba arraigado ahí. «La gente todavía juega. En Capital Federal no se juega al fútbol. En el interior sí, en el centro del país. En Italia y Alemania, tampoco hay lugar. En África, en cambio, juegan en todas partes. Tienen países fuertes, como Camerún, Nigeria, Sudáfrica, Marruecos y Túnez. Y eso es bueno, porque tienen técnica», comentó Bilardo.

Iniciativas para retener talento

La construcción de un futuro sólido para el fútbol marroquí también ha sido impulsada por decisiones políticas y demográficas. Con el objetivo de atraer a jugadores nacidos en Europa, donde prevalece la tradición futbolística, se ha creado un plan convincente. Este desarrollo se ha acelerado en los últimos años bajo el liderazgo del rey Mohamed VI, quien asumió en 1999. A pesar de ser considerado uno de los hombres más ricos de África, conocido como «el rey de los pobres», Mohamed VI ha usado parte de su fortuna para promover a Marruecos como potencia futbolística.

Este país será sede del Mundial 2030 junto a España y Portugal, lo que añade otra capa de importancia a su proyecto futbolístico. Bajo la visión de la Real Federación de Fútbol de Marruecos (FRMF), se busca frenar la fuga de talentos y fortalecer la base del fútbol. En 2019, la FRMF abrió una academia de fútbol en Salé, cerca de Rabat, con una inversión de 63 millones de euros, destinada a formar futuros talentos que representarían a Marruecos.

Nuevas estrategias y resultados positivos

Este esfuerzo también incluye la búsqueda de futbolistas que hayan migrado y jugado en categorías juveniles en Europa. Un ejemplo claro es Lamine Yamal, estrella del Barcelona, quien, aunque podría haber jugado con Marruecos por su herencia familiar, optó por España. Además, la federación estableció una red de cazatalentos en Europa y Asia, similar a la estrategia de la AFA en Argentina.

Durante el Mundial Sub 20, Marruecos incorporó a Abián Perdomo, ex responsable de la formación de jóvenes futbolistas en el Real Madrid. Por otro lado, el rey financió la Academia Mohammed VI, una instalación de alto rendimiento con una inversión superior a 80 millones de euros, que incluso fue empleada por el club en 2024. La academia ofrece 11 canchas, incluyendo instalaciones techadas y áreas para deportes como el futsal y fútbol playa.

En total, 26 selecciones nacionales entrenan allí, y hay más de una docena de programas de capacitación para futbolistas, entrenadores y árbitros. Durante este proceso, el rey también ha financiado la construcción de más de 150 canchas en todo el país y 13 academias, además de subsidios a clubes para mejorar sus instalaciones.

Resultados recientes y expectativas futuras

Los efectos de estas iniciativas ya son palpables. La selección sub 17 fue subcampeona en la Copa África 2023 y se coronó campeona en el torneo siguiente, mientras que la sub 23 ganó el título continental y obtuvo medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de París 2024. Mohamed Ouahbi, entrenador de la sub 20, afirma: “Tenemos jugadores que luchan por su país desde muy jóvenes, y eso es impresionante. Saben que cuentan con el apoyo de una nación y un rey, lo que les da alas”.

La sub 20 ha sido la revelación del Mundial de Chile, terminando primera en su grupo junto a Brasil, España y México. En el camino hacia la final, eliminaron a Corea del Sur, superaron a Estados Unidos y dejaron fuera a Francia en semifinales. Su figura principal es Othmane Maamma, un delantero destacado, actualmente en Watford, que ha contribuido con un gol y tres asistencias durante el torneo.

Este domingo, a las 20:00, Marruecos se medirá con Argentina en un partido que promete marcar un hito en la historia del fútbol juvenil del país, evidenciando que la continuidad en los proyectos es clave para los resultados a largo plazo.