Viaje a Oslo para recibir el reconocimiento
María Corina Machado ha confirmado su viaje a Oslo para asistir a la ceremonia del Premio Nobel de la Paz el próximo 10 de diciembre. Esta decisión llega tras semanas de incertidumbre debido a las presuntas amenazas del gobierno de Nicolás Maduro y las alarmas internacionales sobre su seguridad.
La líder opositora, ampliamente reconocida por su defensa de los derechos democráticos y su esfuerzo por lograr una transición pacífica en Venezuela, se prepara para participar en un evento que representa un importante respaldo internacional a su causa. Según Kristian Berg Harpviken, «Estuve en contacto con la señora Machado esta noche y me confirmó que estará en Oslo para la ceremonia. Dada la situación de seguridad, no podemos dar más detalles sobre la fecha y la forma en que vendrá».
Riesgos y participación de otros líderes
El presidente del Comité, Jørgen Watne Frydnes, reiteró que el traslado de Machado conlleva un riesgo tangible, señalando que «el régimen de Venezuela ha dicho que quiere quitársela de en medio». Su deseo de que se garantice su integridad al salir y regresar del país fue una preocupación destacada.
También asistirá Edmundo González Urrutia, ex-candidato presidencial y figura de la oposición, quien se exilió en España desde septiembre de 2024 debido a una orden de arresto emitida por el chavismo. González Urrutia confirmó su asistencia a Noruega luego de recibir el Premio Internacional 2025 del Instituto Milton Friedman, reconocimiento que subraya la persecución política que lo llevó al exilio.
Entre los mandatarios que han anunciado su participación se encuentra el presidente argentino Javier Milei, cuyo apoyo fue agradecido por el equipo de campaña de Machado, destacando que «Su presencia en Noruega es un gesto de hermandad continental que reafirma el compromiso de Argentina con la democracia y la defensa de los derechos humanos del pueblo venezolano».
Asimismo, los presidentes de Ecuador y Panamá, Daniel Noboa y José Raúl Mulino, respectivamente, también han confirmado su participación.
Significado del Nobel de la Paz
El Premio Nobel de la Paz otorgado a Machado resalta su “incansable labor en la promoción de los derechos democráticos del pueblo venezolano y su lucha por una transición justa y pacífica de la dictadura a la democracia”. Esta distinción aumenta la atención internacional sobre la crisis en Venezuela, que se encuentra marcada por detenciones arbitrarias y un creciente aislamiento del régimen.
En los días previos a la ceremonia, el partido de Machado, Vente Venezuela, ha convocado manifestaciones de apoyo en al menos 24 países para simbolizar el reconocimiento global y expresar que “la lucha de Venezuela por la libertad sigue viva”. No obstante, se aclaró que no se podrán organizar movilizaciones internas debido al clima de represión que dificulta la seguridad de los ciudadanos.
Mensaje de Machado
En recientes intervenciones virtuales, Machado ha enfatizado la necesidad de avanzar hacia una transición política efectiva. Durante un evento con la Asociación Venezolano-Estadounidense en Nueva York, afirmó que la oposición está “más organizada que nunca”, con «liderazgo legítimo y acompañamiento internacional», y subrayó que el reto inmediato es coordinar los pasos necesarios para cumplir el mandato popular.
En ese encuentro, destacó que el pueblo venezolano “ha sufrido, pero se niega a rendirse”, mencionando que los opositores enfrentan la represión con “dignidad y fuerza moral”. Asimismo, recordó el sacrificio de “exiliados y presos políticos que fueron separados de sus familias y entregaron todo por la causa democrática” y agradeció al presidente Donald Trump por considerar la transición venezolana como “una prioridad”.
La situación en Venezuela sigue marcada por la persecución de líderes opositores, el exilio forzado de figuras clave y un creciente aislamiento diplomático, mientras las sanciones de Estados Unidos, incluyendo el cierre del espacio aéreo, complican las operaciones comerciales y la movilidad en la región, impactando a la diáspora venezolana que sigue siendo fundamental en la agenda global. La crisis política y social continúa profundizándose, con un régimen decidido a bloquear cualquier avance opositor y una comunidad internacional esforzándose por mantener la presión hacia una transición que devuelva la institucionalidad democrática.