Mensaje navideño multilingüe del Papa León XIV
Durante su primera misa de Navidad, el Papa León XIV se dirigió a la multitud congregada en la plaza de San Pedro, saludando en 10 idiomas diferentes, que incluyeron francés, inglés, alemán, español, portugués, polaco, árabe, chino y latín. Desde el balcón principal de la basílica, el pontífice ofreció su bendición “Urbi et Orbi”, destinada a Roma y al mundo, y otorgó una indulgencia plenaria a todos los fieles presentes.
A pesar de la lluvia intermitente, cerca de 30,000 personas siguieron la ceremonia y respondieron con aplausos entusiastas. León XIV retomó la tradición de saludar en diversas lenguas, un gesto que había estado ausente durante los 12 años de papado de su predecesor, el papa Francisco.
Mensajes de paz en tiempos de conflicto
En su mensaje, el Papa expresó: “Feliz Navidad. Que la paz de Cristo reine en sus corazones y en todas las familias”. No obstante, su mensaje no estuvo exento de referencias a los conflictos bélicos actuales. Pedió “justicia, paz y estabilidad” para regiones como Líbano, Palestina, Israel y Siria, áreas que continúan sufriendo por la guerra.
- Apoyo a las víctimas de guerras en Sudán, Sudán del Sur, Mali, Burkina Faso y Congo.
- Saludo especial a los cristianos del Medio Oriente.
- La importancia de restablecer la amistad entre Tailandia y Camboya.
- Ayuda ante los desastres naturales en el sur de Asia y África.
El Papa también hizo un llamado a la comunidad internacional para poner fin a la guerra en Ucrania. “Cada uno de nosotros debe hacer lo necesario para rechazar el odio y la violencia, practicando el diálogo y la reconciliación”, enfatizó.
Compasión por quienes sufren
León XIV imploró paz y consuelo para “quienes han sido desgarrados por las guerras”, incluyendo a los que viven en Gaza, a quienes les ofreció un mensaje especial de solidaridad. Reconoció la difícil situación humanitaria en la región, acentuada por el conflicto entre Hamás e Israel que ha cobrado numerosas vidas.
Además, expresó su preocupación por los numerosos refugiados y migrantes que buscan una vida mejor, así como su apoyo a los jóvenes que enfrentan dificultades laborales y a aquellos que viven en condiciones precarias.
El Papa animó a las naciones involucradas en el conflicto ucraniano a buscar una resolución pacífica, enfatizando la necesidad de que se reanuden las negociaciones. En su sermón, también destacó la relevancia del diálogo en América Latina, deseando que los líderes políticos prioricen el bien común sobre las divisiones ideológicas. Finalmente, pidió por Haití, instando a que cese la violencia y se fomente la paz y la reconciliación.
