Un reto para el empresariado argentino
Argentina se encuentra en uno de esos momentos cruciales donde la sociedad es llamada a replantear sus valores y acciones. Este cambio cultural no solo toca la política y la vida pública, sino que también afecta a los empresarios.
La necesidad de una visión a largo plazo
Si aspiramos a un país estable y predecible, es imprescindible dejar de lado la lógica de la especulación inmediata y comenzar a construir con una perspectiva de largo plazo.
En el ámbito asegurador, los costos están fuertemente influenciados por el dólar, factores como los reaseguros internacionales, la inflación y la siniestralidad marcan la pauta. Aunque sería sencillo trasladar automáticamente estos incrementos a las tarifas, la responsabilidad empresarial no radica en especular, sino en mantener la estabilidad.
Construir confianza en el sistema
¿De qué sirve trasladar todos los costes al cliente si esto erosiona la confianza en todo el sistema? En mi experiencia, estoy decidido a realizar el máximo esfuerzo para mantener las tarifas a pesar de los cambios en los precios, pues no puede ser esta la salida. No soy el único; hay una comunidad de empresarios dispuestos a seguir este camino.
Argentina no debería depender eternamente de monedas extranjeras o préstamos externos. El verdadero desafío consiste en construir una economía equilibrada, con reglas claras y empresarios comprometidos con el soporte, en vez de la especulación.
El futuro se construye con decisiones responsables
El futuro no se logrará a través de atajos financieros o soluciones mágicas. La ruta hacia adelante se basa en decisiones responsables, confianza en nuestras capacidades y la firme creencia de que este país puede sostenerse por sí mismo. Estoy preparado para ello, y cada vez somos más los que compartimos esta visión de construir una Argentina fuerte para las futuras generaciones.
(*) Gabriel Bussola, miembro de la Asociación de Aseguradores Argentinos y presidente de Libra Seguros.