Virginia Pérez Antonelli expresa su descontento
Virginia Pérez Antonelli, quien intentó salvar la vida de Fernando Báez Sosa realizando maniobras de Reanimación Cardiopulmonar (RCP) tras el violento ataque ocurrido en enero de 2020, manifestó su enojo por no haber sido mencionada en el reciente documental lanzado por Netflix. La serie se presentó el pasado 13 de noviembre y está enfocada en uno de los casos más impactantes del país.
A pesar de que el documental ha recibido críticas positivas, la falta de referencia a la historia de Virginia y su intento por reanimar a la víctima ha generado reacciones negativas entre los espectadores.
Un momento clave en el juicio
Virginia, quien en el momento del ataque tenía 17 años, se destacó por su valentía al intentar reanimar a Fernando. Su testimonio fue crucial durante el juicio contra los acusados, donde puso de manifiesto su experiencia. En la sala, reiteró sus esfuerzos por salvar a la víctima y defendió sus acciones ante la defensa de los imputados.
Durante su declaración, recordó que mientras realizaba la RCP le decía a Fernando: “Quedate conmigo, por favor”, un momento que conmocionó a todos los presentes. Pese a la presión de las preguntas del abogado defensor, Hugo Tomei, Virginia mantuvo su firmeza.
Indignación en redes sociales
La exclusión de su nombre del documental no pasó desapercibida, y Virginia no tardó en expresar su indignación en sus redes sociales. Un usuario en X (ex Twitter) catalogó la omisión como un “grave error”. La joven se manifestó en su cuenta: “Algunos prefieren darles voz a asesinos y/o cómplices! ¿Pero quiénes somos nosotros para juzgar?”
Recuerdos de aquella noche trágica
En su relato del juicio, Pérez Antonelli indicó que en el momento de la pelea afuera del boliche, dijo: “listo, tenemos que cruzar y ver qué está pasando acá”. Observó la violencia con la que actuaban los rugbiers y aseguró que fueron “muy violentos” en su accionar.
Sobre esa noche fatídica, recordó cómo, tras la huida de los acusados, ella y dos policías se acercaron para asistir a Fernando. “Cuando vi que le estaban haciendo RCP, demasiado atolondrado les dije: ‘yo me voy a encargar de sostenerle la cabeza e indicarles cómo tienen que hacer’”.
Virginia evocó el momento en que, al apartar las manos del rostro de Fernando, lo miró y le habló, esperando algún gesto de vida. Aquel momento impactante la marcó profundamente, y al ver a Fernando herido, se encontró con “manos llenas de sangre”. También mencionó que se tomó algunas fotografías que la querella ha solicitado incorporar al caso.
