Un cierre de año sólido para Javier Milei
Javier Milei llega al final de 2025 en una posición política robusta. Tras los resultados electorales que superaron las expectativas en su entorno, el Presidente comienza a contemplar la posibilidad de reelección en 2027. Dos meses después de su triunfo en las elecciones de medio término, Milei se enfoca en la creación de un nuevo ciclo político personal, cimentado en logros legislativos, mejoras económicas y un perfil internacional en ascenso.
Fortalecimiento en el Congreso
En el ámbito legislativo, La Libertad Avanza se establece como la primera minoría en la Cámara de Diputados. El oficialismo ha incorporado a elementos significativos del PRO y la UCR, mientras que aquellos legisladores que permanecieron en sus bloques originarios actúan como aliados en la práctica. Gracias a figuras como Diego Santilli, Martín Menem, Karina Milei y Manuel Adorni, el Gobierno logró dividir los bloques de Unión por la Patria y conseguir apoyo —no incondicional— de varios gobernadores peronistas.
Este entramado político fue crucial para la aprobación del Presupuesto, que se aprobó con 46 votos a favor, 25 en contra y una abstención. Esta victoria abre las puertas a posibles negociaciones sobre la reforma laboral. Por su parte, el peronismo y otros opositores aún luchan por reestructurarse y encontrar un liderazgo capaz de enfrentar este nuevo panorama.
Situación económica al cierre del año
Desde la Casa Rosada, consideran que el año concluyó con un orden en el ámbito económico. El país cerró el período con un dólar estabilizado, que no superó el umbral de la banda cambiaria ni se disparó tras el anuncio del ministro de Economía, Luis Caputo, sobre ajustes en esa banda alineados con la inflación. A pesar de un incremento en el índice de precios de 1.5% a 2.5%, y las dudas sobre la velocidad de una posible baja, la inflación anual se sitúa alrededor del 30%, un nivel notablemente moderado en comparación con la historia reciente argentina.
Proyección internacional y desafíos futuros
A nivel internacional, Milei se ha consolidado como una figura prominente dentro del universo libertario. Su alineación con Israel y, en especial, con Donald Trump, lo han posicionado en el panorama global y proporcionado a la economía un «salvataje de última instancia».
Con este contexto, el Gobierno enfrenta desafíos para el próximo año. El primero es mantener el crecimiento: la economía ha alcanzado una tasa del 5% anual, y se espera que ese ritmo se mantenga en 2026. Otro desafío es que las mejoras ya observadas en el sector financiero, la minería y el agro se extiendan a la industria, que enfrenta dificultades debido a la apertura de imports.
Desde la Casa Rosada, confían en que la Copa del Mundo, que comenzará en junio, actúe como un factor positivo que apoye la cohesión social durante el año. Sin embargo, advierten que el margen de error es limitado: el Presidente entiende que evitar errores propios y optar por la negociación en lugar de la confrontación suele ofrecer mejores resultados.
Mirando hacia el futuro
Con una mezcla de firmeza y pragmatismo, Milei se adentra en esta nueva etapa con confianza. Para él, 2027 «está a la vuelta de la esquina». Todos los indicios apuntan a que su estrategia ya se ha puesto en marcha: consolidar poder, asegurar la gobernabilidad y preparar el camino para la lucha por la reelección.