Un Clásico emocionante en Madrid
Los partidos clásicos siempre son eventos únicos, donde la situación de cada equipo en la liga parece no importar. En este contexto, el Atlético de Madrid sorprendió a todos al vencer al Real Madrid por 5-2 en un derbi vibrante correspondiente a la temporada 2025/26, marcando un antes y un después en la campaña del equipo. Este encuentro fue especialmente notable por la actuación estelar de Julián Álvarez, quien se consolidó como el líder indiscutible de su equipo.
Inicio contundente del Atlético
Desde el pitido inicial, el Atlético demostró su intención de dominar. A solo tres minutos del comienzo, Sorloth estuvo a punto de abrir el marcador en un mano a mano con Courtois, aunque su tiempo de reacción permitió que Militao interviniera para evitar el gol. El Real Madrid, por su parte, intentó controlar la posesión, buscando generar ocasiones a través de pases.
El esfuerzo del conjunto local dio frutos rápidamente. En el minuto 14, un preciso centro de Giuliano Simeone fue conectado de cabeza por Le Normand, quien superó a Tchouaméni para poner el 1-0 a favor del Atlético. Sin embargo, Sorloth tuvo otra oportunidad para ampliar la ventaja, pero nuevamente fue contenido por el arquero belga.
Reacciones en el campo
Poco después, cuando el Atlético parecía estar en control, apareció Kylian Mbappé. El francés, en brillante forma, logró igualar las cosas con un gol en el minuto 35, gracias a una asistencia de Arda Güler.
El Real Madrid aprovechó un error defensivo de los rojiblancos para dar la vuelta al marcador. Vinicius, asistido por Mbappé, pasó el balón a Güler, quien no falló y puso el 1-2 en el marcador, en un momento crítico para el Atlético. Sin embargo, la reacción local no se hizo esperar. Julián Álvarez estrelló un disparo en el palo y hubo un gol anulado a Lenglet tras una revisión de VAR. Justo antes del descanso, Sorloth conectó un centro de Koke, restableciendo la igualdad en 2-2.
Un segundo tiempo electrizante
El comienzo del segundo tiempo estaba destinado a ser tan emocionante como el primero. Un centro de Julián Álvarez fue desviado, adjudicándose un penalti que transformó en gol, poniendo a los locales al frente 3-2 en el minuto 50.
A pesar de los cambios estratégicos de Xabi Alonso, el Atlético mantuvo la presión. Julián Álvarez, demostrando su calidad, anotó un asombroso tiro libre que dejó sin opción a Courtois, aumentando la ventaja a 4-2. Este gol firmó su influencia en el partido, llenando al estadio de júbilo.
Un desenlace contundente
Con el ánimo decaído en el bando merengue, el Atlético controló el juego. Antoine Griezmann, quien ingresó en el final, selló la victoria con un último gol, finalizando el partido en 5-2 y dejando claro que el Atlético de Madrid se presentaba como un equipo poderoso en esta temporada.
El último pitido dejó a los jugadores del Real Madrid visiblemente frustrados, mientras que el Atlético celebraba un triunfo que sin duda marcará la pauta en sus próximos partidos. Esta victoria no solo representa un gran orgullo para la hinchada colchonera, sino que también desmorona la ilusión del invicto merengue en este choque.